Archivo de la etiqueta: Prosa Poética

“Ana y su pintor”, por Graciela Cristina Strañák

vogue_brazil_feb08_ed_Cara_Pinta-1 Y Ana tenía un pintor. Cada día, por las mañanas, tomaba su pincel de amor, y suavemente trazaba una sonrisa amplia, con brillitos de pasión, iluminaba el rostro de su amada, y dibujaba pajaritos en su mirada.

Ana tenía un pintor. Cada día, un corazón feliz le estampaba en el pecho, y unos brazos fuertes atrapaban a los de Ana, la mecían, la acunaban, y con una goma de borrar, hacía desaparecer todos los trazos que a ella lastimaban.

Ana tenía un pintor. Y su carcajada resonaba en las madrugadas asustando nubes traicioneras, malas.

Ana tenía un pintor. Pero su pintor no sólo pintaba sonrisas a Ana, también dibujaba soles en otras caras, y lentamente, sin que el pintor se diera cuenta…fue borrando los trazos bellos que una vez había dado, y Ana se fue quedando con una mueca de mujer lastimada.

Ana tuvo un pintor…

Graciela Cristina Strañák©
Fuente: http://wwwmicatarsis.blogspot.com/


“El cuadro”, por Iñaki Preciado Idoeta

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Contemplabas el valle a vista de pájaro, con sus pueblos diseminados por las laderas y junto al pequeño río. Veías cómo llegaba a perderse a lo lejos, en la oscura y ancha cinta del río de la Felicidad, el río de Lhasa. Y luego éste, allá, muy lejos, confundido con la bruma desaparecía entre las montañas que protegen el Yalungtsangpo. Poderosas montañas cuya fuerza, irradiando desde sus cumbres nevadas, llegaba a apoderarse de ti. Si algo hace diferentes a las cordilleras del Tíbet es esto precisamente, pues en ninguna otra parte se hace tan patente y perceptible la energía que desprenden las montañas. Hay algo, sin embargo, de aquel paisaje que no se puede describir, y sin lo cual todo cuanto acabáis de leer se quedará en pura y vacía sombra, incapaz de provocar el sentimiento que al que esto escribe provocó. Ese algo es… la luz.

Ya desde el mismo monasterio podías admirar aquel sorprendente espectáculo, pero la soledad y el silencio de la gruta acrecían la sensación. Era como si tu capacidad de percepción estética se hubiera centuplicado.

Unos días después estaba allí de nuevo. Instrumentos rituales, libros, el thangku para la tsampa, fruta, saco de dormir, una linterna, papel y lápiz, en fin, todo lo necesario para pasar retirado una semana. Únicamente me alejaba una vez al día para lavarme en un cercano arroyo. De ojos para adentro nada puedo decir, de ojos hacia fuera tampoco puedo, pero por pura incapacidad, como antes he dicho, de describir lo que durante aquellos días me fue dado contemplar. Me sentaba en una piedra, en el borde de la explanada, como cuando te sientas en un museo delante de una tela famosa. Sólo que en Shúgseb el sentimiento era infinitamente más profundo, y no llegabas a saber quién contemplaba a quién. No eras tú el que admiraba el paisaje, sino el paisaje el que te hacía parte suya, y ya no eras más que una gotita de pintura, infinitamente diminuta, en un cuadro de magnitud infinita. Y además una gotita que, una vez puesta en el cuadro, deja ya de ser gotita para convertirse en el cuadro mismo: un cuadro que, en realidad, no es cuadro y que ni siquiera existe.

Iñaki Preciado Idoeta©


“Acerca de la actualidad de la poesía”

mucha-alphonse-mucha-nouveau-reverie-1186102 En el contexto de una época caracterizada por la búsqueda del éxito inmediato y por el culto de la imagen, dominada por las exigencias del mercado e indiferente a los intereses más profundos del ser humano, la poesía aparece como una manifestación extraña y en cierta forma anacrónica.

Es cierto que también los otros géneros literarios tienen dificultades para acceder al reconocimiento del público, pero es no menos indudable que todos ellos (la novela, la dramaturgia, el cuento y el ensayo) generan un promedio de ventas mayor al de los libros de poesía. La pregunta que se impone es entonces la siguiente: ¿Qué es lo que hace al poeta reincidir?, ¿Qué es lo que sostiene su misteriosa actividad? No está muy claro que exista una sola respuesta a esta pregunta, ni siquiera está claro que exista alguna, pero una posible contestación es la siguiente: la poesía es, justamente a causa del lugar marginal que ocupa en la sociedad de nuestro tiempo, la más indicada entre todas las actividades humanas para generar un proyecto de vida alternativo.

Al no buscar el éxito y al no "pretender " cambiar la sociedad, representa una acción que constituye un fin en sí misma. Una acción que le permite al hombre objetivarse evitando al mismo tiempo el riesgo de toda alienación. Decir que la poesía actúa sin pretender no equivale a presentarla como cómplice de un determinado orden social y político, sino presentarla en su aspecto más característico: como un misterio que irrumpe en la existencia del ser humano transformándola. La poesía es crítica respecto de cualquier sistema, y lo es por el hecho de utilizar el lenguaje en un sentido distinto al cotidiano, haciendo posible de ese modo el acceso a realidades virtuales que tornan más amplia, fecunda y profunda nuestra experiencia vital.

La dignidad de la actividad poética radica en que usa al lenguaje como un medio para acceder al interioridad del ser humano, o para mostrar el modo en el cual el ser se manifiesta en cada época, por utilizar una expresión heideggeriana. Por usar el lenguaje como un fenómeno estético, es ajena a su empleo en un sentido retórico. No busca producir un efecto, no pretende convencernos de nada, simplemente sucede, y logra transformar el ser del hombre modificando sus intereses y su concepción del mundo en el cual le ha tocado habitar.

La poesía pertenece al ámbito de la libertad inevitable. Pertenece al ámbito de la libertad porque es una acción que constituye un fin en sí misma, pero al mismo tiempo pertenece al ámbito de lo inevitable, ya que nadie, ni siquiera el mismo poeta, puede evitar que tenga lugar la experiencia poética.

Si el poeta sintiese que puede prescindir de su obra debería hacerlo, ya que la poesía, como toda obra de arte, tiene su origen en una intuición de carácter misterioso que luego es desarrollada por obra y gracia del "oficio" del creador. La inspiración es amiga del esfuerzo diario, dijo Baudelaire; pero la intuición debe ofrecérsele al poeta sin que éste la demande, y ella habrá de ser siempre el punto de partida de la poesía auténtica.

Creo que no hay mejor manera de acceder al significado de la palabra poesía, en la medida que esto resulta posible, que remitiéndose al significado etimológico del término. La palabra poesía procede del griego poiesis que significa producción; pero eso no basta para agotar el tema, ya que es evidente que no toda producción es una poesía ¿cuál es, entonces, la diferencia fundamental entre la poesía y las otras formas de producción? La respuesta es muy simple: lo propio del hecho poético es que éste no produce objetos como un medio para conseguir alguna otra cosa, sino que es una acción que constituye un fin en si misma, esa es la razón por la cual quienes cultivan la poesía pueden encontrar en ella una forma de realización no material.

La poesía resulta fundamental en una época como la nuestra porque en ella, como bien lo advirtiera Max Horkheimer, cada vez somos más incapaces de hacer una cosa por amor a ella misma. No resulta casual que filósofos como Nietzsche o Heidegger, que constituyen referentes fundamentales del pensamiento actual, hayan visto en la poesía una posible superación de la misma filosofía, esto se debe en el caso de Heidegger al hecho de que el lenguaje poético estaría más cerca del ser que el filosófico; y en el caso de Nietzsche a que la poesía no es especulativa sino productiva, como lo expresara el propio Nietzsche en sus escritos.

Para terminar, entonces, tendríamos que decir que la poesía es paradójica en tanto y en cuanto constituye una pasión activa que nos libera del plano de lo cotidiano para transportarnos a un plano más trascendente al cual el poeta no puede ni debe calificar. La poesía es, en ese sentido, una aproximación a lo inefable que se distingue por su enorme capacidad de sugerir.

Alejandro Félix Raimundo©


Ciclo de charlas: “Las dos caras judías”

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Y llegamos al final de este ciclo de encuentro con las palabras de nuestros escritores israelíes contemporáneos, donde viajamos en el tiempo del timón de A. B. Yehoshúa.

Entramos en la casa de Amos Oz que se abrió con todas las respuestas como una gran biblioteca, ahora nos queda formular las preguntas.

Corrimos por las calles de Jerusalén junto a David Grossman. Y hoy abrimos los sentidos al canto de los poetas.

Gracias por acompañarme. ¡Mil gracias!

 

Naharia, Israel , Mayo 4 de 2010,  Roberto Sánchez – Juan Zapato


Sobre la humildad

Caminaba con mi padre, cuando él se detuvo en una curva y después de un pequeño silencio me preguntó:

– Además del cantar de los pájaros, ¿escuchas alguna cosa más?

Agudicé mis oídos y algunos segundos después le respondí:

– Estoy escuchando el ruido de una carreta…

– Eso es -dijo mi padre- es una carreta vacía.

Pregunté a mi padre:

– ¿Cómo sabes que es una carreta vacía si aún no la vemos?

Entonces mi padre respondió:

– Es muy fácil saber cuándo una carreta está vacía, por causa del ruido. Cuánto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace.

Me convertí en adulto y hasta hoy, cuando noto a una persona hablando demasiado, interrumpiendo la conversación de todos, siendo inoportuna, presumiendo de lo que tiene, sintiéndose prepotente y haciendo de menos a la gente, tengo la impresión de oír la voz de mi padre diciendo:

“Cuanto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace”

La humildad consiste en callar nuestras virtudes y permitirle a los demás descubrirlas. Nadie está más vacío, que aquel que esta lleno de “yo mismo”.

Anónimo

Maru Canales©


El hambre ocurre

EL HAMBRE OCURRE

el hambre

su alquimia pertinaz

transmutación violenta

en la costilla


tener un hombre vivo entre los dedos

tirárselo a la muerte


el hambre es una muerte

que se hace la olvidada

se demora


finge buscar su cita en la libreta


pero al final te toca

y es una brea

inarrancable


no deja cicatriz


o sustrae al más pequeño de la casa

lo convida

al baile helado


el hambre ocurre

esto lo escribo en Costa Rica

estamos en setiembre ochenta y cinco


pero resulta

la muerte aquí es católica apostólica

el sueño en que moramos no resiste

este grillete

así nadie comenta

el hambre queda en rasgo de mal gusto


la paz


aquí la paz se nutre con la sangre

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Ana Istarú (Ana Soto Marín)©

Poeta y actriz costarricense nacida en San José en 1960. Guiada por sus padres, inició muy joven la carrera literaria publicando su primer libro de poemas a los quince años. Junto a Eunice Odio y a Carmen Naranjo, stá considerada como una de las figuras más prominentes del panorama literario de su país, con reconocimientos internacionales como los premios españoles María Teresa de León para autoras dramáticas en 1995 y el premio Hermanos Machado de Teatro en 1999. En 1990 le concedieron la beca de creación artística de la Fundación Guggenheim. De su obra poética se destacan: Palabra nueva en 1975, Poemas para un día cualquiera en 1977, Poemas abiertos y otros amaneceres en 1980, La estación de fiebre y otros amaneceres en 1983, La muerte y otros efímeros agravios en 1988, Verbo madre en 1995 y Poesía escogida en 2002.


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«El traductor apresurado» micro relato de Eduardo Berti

Un muy novato editor de París, que dirigía una colección que daba preponderancia a los libros clásicos (no por amor a las «obras inmortales», sino porque los literatos muertos no pretenden regalías), dio a traducir la novela Vathek, de William Beckford, sin saber que el inglés la había escrito originalmente en francés y que la versión que él tomaba como texto madre no era otra cosa que la traducción del reverendo Samuel Henley. Continuar leyendo


Homenaje a Roberto “El Negro” Fontanarrosa

 Cliquea en la imagen para leer el texto completo.

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Circo General, Circo Popular

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Circo General, Circo Popular

 

En este Circo General

fantástica visión de la realidad

donde los colores nos inundan

nos bañan a cada instante,

aparece en una puerta un León Patrón

y por la otra un Obrero Payaso.

 

Nosotros que vivimos en el circo irreal.

Nosotros que jugamos con la gente.

Nosotros que armamos la poesía de palabras sin papel.

Nosotros que levantaremos un Circo Popular.

Nosotros que somos el payaso.

 

Juntos compañera vamos a devorar al león.

Juntos compañera vamos a darles pan a nuestros hijos.

Juntos compañera vamos a combatir en el ejército de la alegría.

Juntos compañera vamos a interrumpir los silencios.

Juntos compañera vamos a pasear nuestro amor.

 

En este circo general

fantástica visión de la realidad

desde este lado del mundo, geografía occidental

te prometo compañera que cada mañana

cuando por la ventana de tus ojos

veas despertar al Sol general,

verás que por una llorarás de alegría.

 

Esa mañana

el Sol se mostrará Estrella como debe ser

juntos estaremos, estemos donde estemos

en la trinchera del Sol, de la mano del Payaso

con un clavel en el puño

y en nuestro cuerpo, la Revolución latiendo amanecida,

y en nuestro cuerpo, el Circo Popular desplegado,

y en nuestro cuerpo, la visión real de aquella fantasía derrotada.

Juan Zapato© 16/08/76

 

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Cometas, por Eloy Mon

El cometa surcaba sistemas planetarios, galaxias, abismos interestelares. La cometa cirros, estratos, cumulonimbos.

El cometa tenía una cola de polvo de estrellas. La cometa, de papel de colores.

Cuando se encontraron en los límites de la estratosfera, enseguida se dieron cuenta de que sólo les separaba un artículo.

Así que lo vendieron.

Y sin nada que se interpusiera entre ellos, fueron cometas.


La Paloma, Rafael Alberti

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Liniers©


CARTA ABIERTA CON LATINAZGO ÚTIL

Señores políticos y autoridades:

CARTA ABIERTA CON LATINAZGO ÚTIL

Sobre textos leídos de derecha a izquierda o de izquierda a derecha. Las mismas palabras, pero distinto significado.

El autor sostiene que el ejemplo propuesto está muy de moda.

Mario de la Fuente Fernández

De mi consideración:

Hace 25 siglos más o menos que los latinos instituyeron los anacíclicos o histeroproterón, que es todo dicho o palabra que leído de izquierda a derecha o viceversa, resulta de igual sonido y significación o que lo primero puede quedar al último o viceversa.

«Laus tua non tua fraus, virtus non capia rerus.

Scandere te facit hoc decus omnipotens».

Este dístico latino esta hoy muy de moda en el mundo porque quiere decir:

«Tu mérito, no tus engaños; tu valer, no tus riquezas, te hicieron ascender a este puesto omnipotente».

Leído al revés:

«Omnipotens decus hoc fecit te escandere rerum.

Copia non virtus, fraus tua non tua laus».

Quiere decir:

Te hicieron ascender a este puesto omnipotente tus riquezas, no tu valer; tus engaños, no tu mérito».

Muy de moda, ¿no?



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Liniers©


Buenos Aires contiene algunos personajes curiosos.

Diagonal Norte esquina Sarmiento, el embotellamiento detiene la marcha de los vehículos y por sobre el ruido porteño se eleva la voz del diariero anunciando: “Cayó el Presidente” y los ávidos lectores compran la quinta para leerla durante el viaje entre semáforo y semáforo o al llegar a sus casas.

Y después la búsqueda infructuosa hoja tras hoja y sin rastro de la noticia cantada.

Juan Zapato© Septiembre de 2005

 

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